lunes, 28 de marzo de 2011

18 años no es nada.

hace un par de días cumplí 18 años de hacer feliz a mi misma esposa.

El festejo la verdad no hizo justicia al motivo, porque la verdad nadie daba un cacahuete por el matrimonio de este ojoalegre muchacho, y ahora, mirando atrás, me siento muy orgulloso de lo que con tanto trabajo he formado: mi familia.

Si veinte años no es nada, decía Gardel, dieciocho es nada menos dos. En dos años seré recién casado nuevamente.

De verdad se me ha hecho rápido.

Estoy más frentón, finalmente las canas empiezan a salir aquí y allá como sexis alambrones blancos; la espalda me duele y me tengo que sentar de ladito y levantarme del retrete colgándome de la toalla; camino como Cuasimodo, traigo la trompa hinchada por caminar descalzo y estoy más ciego que un topo, pero me cae que se me ha hecho rápido.

Perfil atemporal

lunes, 7 de marzo de 2011

Yo confieso

Hoy atardezco sincero, y sincero como me siento, me confieso a mí mismo que...

Las feas que no me halagan se ven más feas.
veo el trabajo como un medio para alcanzar mis fines y no como ningún tipo de realización romántica de nada.
Si no fuera educado saludaría sólo a las bonitas.
Nunca he sentido que tengo todo lo que merezco.
Me considero más inteligente que la mayoría de la gente que conozco.
Me doy cuenta de que mis dientes son horribles y no hago nada por remediarlo.
Casi siempre como más de lo que debo.
Me siento de la alta sociedad.
No puedo socializar con tarugos, aunque hay tarugos a los que tolero por ingeniosos.
Entre una fea que me adore y una bonita que se dé su taco, me quedo con la fea.
Las matemáticas me dan flojera y prefiero usar la calculadora para sumar 32+25+11.
Me encabrona que me llenen de mala vibra.
Soy tonto para conducir autos.
Me aburren los libros de historia y política.
Yo también soñé con ser piloto.

Padre, espero no sea usted el Padre Loreto, porque dejaba unas penitencias que me alejó de la iglesia.

Soy Perfil Bajo, de los Ruiz de Nochistlán.

viernes, 4 de marzo de 2011

De la mesa polaca

En esta mesa, que nada tiene que ver con Polonia, sino con mero debate político, hoy mencionaron cuatro principios que me cayeron muy bien:

1. Todo lo nuevo causa novedad
2. Todo extremo está en la punta
3. Todo lo excesivo es mucho, y
4. Todo lo que se usa se gasta.

Sabiduría popular de la que me gusta.

Perfil sabiondo

¿niño o niña?

Mi hermosa familia está integrada por un papá, una mamá y dos lindas princesas.

No puedo ni imaginar cuántas veces me han preguntado si no extraño un hijo varón, si no me quedé con ganas de buscar "el niño", que si no extraño con quien compartir mis aficiones, y ese tipo de comentarios que a mí (que de verdad comulgo al cien por ciento con la frase "lo que Dios nos mande es bienvenido") me suenan a frases de la abuela.

Puedo jurar que no extraño un hijo. Siempre he agradecido a la vida haber tenido la oportunidad de practicar la paternidad con este par de chiquillas tan monas. Se me dá.

En fin, este preámbulo viene al caso porque recordé un par de frases que intercambié con un primo de mi esposa que tiene sólo hijos y mucho ingenio para echar carro, quien un día en nutrido convivio familiar me dice:

-¿por qué tienes puras hijas primo? ¡los hombres hacemos hombres!
a lo que le contesté,

-Los hombres hacen hombres, pero los cabrones hacemos lo que nos dá la gana.

Cada que me acuerdo me viene una sonrisa, justo como ahora.

Perfil cabrón.

La primera impresión

"Sólo tenemos una oportunidad para causar una buena primera impresión". Hoy recordé esa frase, y también recordé a la Tía Matilde...